¿Porqué la fiscalía tiene miedo investigar al alcalde de Ibagué?

Búnker de la Fiscalía en Ibagué y Guillermo Alfonso Jaramillo Martínez. Cambioin

 

Dos años, lleva durmiendo el sueño de los justos en el despacho del Fiscal 53 seccional Eduardo Jaramillo, el proceso penal que cursa contra el alcalde de Ibagué Guillermo Alfonso Jaramillo y la primera gestora del municipio Vilma Piedad Gómez Cano, después que cambioin.com el portal de las noticias, descubrió que el mandatario local y su compañera sentimental, habrían incurrido en el delito de falsedad en documento público, por las escrituras de una de sus propiedades, las cuales para la fecha que aparecen registradas en una notaría, el vendedor de los terrenos adquiridos por el médico Jaramillo y su esposa, estaba muerto, demora que pone en tela de juicio la imparcialidad y celeridad que debe asumir y dar el ente acusador a estos casos, teniendo en cuenta que los involucrados son figuras públicas ya que ostentan una dignidad. 

Abogados de la ciudad conocedores del tema, se atrevieron a indicar a esta redacción, que la no celeridad en el proceso por parte de la Fiscalía General de la Nación, seccional Tolima, evidencia un presunto favorecimiento de la justicia del país a los involucrados, debido a que se corre el riesgo que la denuncia sea archivada por vencimiento de términos. 

La historia.

El 11 de mayo del año 2016, este medio de comunicación digital en su primera entrega informativa, denunció que el 2 de septiembre del año 1971, Guillermo Alfonso Jaramillo y quién algunos identifican como su tío, mientras otros dicen es su primo, el señor Gabriel Jaramillo Roncancio, compraron por 850 mil pesos la finca denominada el espejo, negocio que quedo radicado bajo la escritura 636 de la notaria única del municipio de Armero. Posteriormente el 23 de abril de 1986, seis meses después de la tragedia que borro esa localidad del norte tolimense, el médico Guillermo Alfonso, vendió la parte que le correspondía del terreno en mención a su familiar por el valor de 5 millones de pesos, negocio que se cerró bajo la escritura 0753 de la notaria 25 de Bogotá en fecha 23-04-1986.

El 28 de diciembre del año 2011, bajo escritura pública 3890 de la notaria primera de Ibagué, el señor Gabriel Jaramillo Roncancio, le volvió a vender a su familiar Guillermo Alfonso Jaramillo Martínez y a la esposa de este Vilma Piedad Gómez Cano, una porción de la finca que una vez habían comprado juntos. En esta oportunidad fueron 27 hectáreas por 33 millones de pesos. Se comprueba con el certificado de libertad y tradición del bien inmueble en mención, qué tanto el hoy Alcalde de los Ibaguereños, como el señor Gabriel Jaramillo, no solo son familiares, sino que han tenido negocios juntos por muchos años, es decir se conocen suficiente. Leer artículo completo en el siguiente enlace.

Ver: http://www.cambioin.com/alcalde-de-ibague-falsifico-firma-de-un-muerto-para-aduenarse-de-tierras/

El caso que involucrada a Guillermo Alfonso Jaramillo, tomó un giro inesperado, cuando cambioin.com se enteró, que la víctima en el proceso nombró como su abogado de confianza, al reconocido jurista Jaime Granados, quien en una entrevista concedida en exclusiva el 14 de diciembre del 2016, a este medio de comunicación digital, claramente esbozó las repercusiones que traería a Ibagué, la captura del alcalde de la capital tolimense, de llegarse a demostrar que es culpable de los delitos que se le endilgan. Leer artículo completo en el siguiente enlace. 

Ver:  http://www.cambioin.com/fiscalia-imputara-cargos-al-alcalde-de-ibague-abogado-jaime-granados/

Cabe resaltar, que el único movimiento significativo que ha tenido el proceso hasta la fecha, ha sido que el órgano acusador, determinó unificar dos denuncias adelantadas en esa entidad pero en oficinas diferentes por ser sobre los mismos hechos. Por un lado la acusación penal instaurada por el prestigioso abogado Jaime Granados en representación de las víctimas, hijos del fallecido quienes aseguran que su padre nunca le vendió esas mejoras a su familiar hoy alcalde de Ibagué. En segunda instancia, apareció una denuncia penal realizada por la notaria primera de la capital musical de Colombia Doris Mora Orrego, contra Guillermo Alfonso Jaramillo Martínez y otros, por inducirla a cometer un posible fraude procesal al momento de elaborar la escritura 1854. La guarda de la fe pública, determinó iniciar acciones legales contra el actual gobernante de los Ibaguereños, teniendo en cuenta versiones escuchadas de personas cercanas a Jaramillo, donde daban a entender que la culpa de la irregularidad era responsabilidad de su oficina. La funcionaria anexo todos los documentos objeto del trámite, los cuales demostrarían exactamente en la fecha que se realizó la escritura. Esta situación complicaría aún más el proceso contra el burgomaestre, aseguraron algunos expertos en el tema. Leer artículo completo en el siguiente enlace.  

Ver: http://www.cambioin.com/se-agrava-caso-alcalde-de-ibague-y-la-escritura-firmada-por-un-muerto/

Tal parece ser, que el único que no se ha percatado de la magnitud de lo denunciado, es el fiscal 53 seccional, encargado de investigar la situación, ya que después de un año, es decir el 3 de marzo de 2017, citó a interrogatorio a los involucrados en el bochornoso escándalo, pero después de esa  actuación el proceso no avanza demostrando una vez más, como en el caso del alumbrado navideño de 2016, que la Fiscalía le tiene miedo a Guillermo Alfonso Jaramillo Martínez. Ver artículo completo en el siguiente enlace. 

Ver: http://www.cambioin.com/fiscalia-interrogo-alcalde-de-ibague-por-caso-de-la-escritura-donde-firma-un-muerto/

 

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