Alcalde Jaramillo y su deuda con la alimentación escolar en la capital

Programa PAE en Ibagué, se desató la corrupción y al parecer el pastel no alcanzó para todos,

En el 2017 el programa de alimentación estuvo en manos de una empresa costeña, que dejó en banca rota varios proveedores Ibaguereño, por su mal proceder fue sancionada sin oportunidad de mejorar sus fallas (cómo debía ser según la norma), inclusive el mismo alcalde hacia visita en muletas donde sin importar que estaba recién operado, verificaba las denuncias que hacían concejales amigos de su mismo partido, el personero, el contralor, entre otros. Por eso causa curiosidad que ahora en el año 2019, exactamente al mes de abril, cuando se le adjudicó a un operador que provenía de la misma parte de donde era el sancionado, con diferente nombre, inclusive la misma secretaria de educación ponía el grito en el cielo e informaba su descontento por los ganadores de la licitación de más de 13.300 millones de pesos, pero luego a pesar de certificar los cientos de errores de ese operador que inclusive aún maneja el programa, no ha hecho nada, (será entonces que hicieron una obra de teatro),en el segundo semestre el operador cuestionado, según lo informa la misma mesa pública, mejororaron al 100% sin reportar hallazgos o descuentos según el informe entregado por la titular de educación municipal, haciendo oídos sordos a las denuncias públicas de la comunidad.

En la actualidad la concejal Linda Perdomo, amiga de la administración realizó denuncia ante la fiscalía por el mismo tema, (por eso surge la pregunta si dicho pastel solamente alcanzó para pocos) o faltó que el alcalde y su secretaria de educación ejercitan una mejor y más profunda supervisión para evitar todas las irregularidades que se presentaron, y que ojalá a futuro el nuevo mandatario no las vuelva a repetir por el bien de la niñez Ibaguereña.

Para rematar esta triste historia, otra ofina estatal responsable del caos fue la secretaría de salud municipal por emitir un concepto sanitario a una bodega que no estaba acondicionada como planta, según los criterios que se debían cumplir en la Bolsa por donde se hizo la escogencia del contratista, decía que el operador cumpliera con ese requisito, por eso ese despacho oficial emite un concepto a una planta que en primer lugar no conocía por ser un negocio ciego en la bolsa mercantil y segundo porque la planta no existía, este y varios interrogantes dejan muy mal parado al alcalde de Ibagué, con el tema de la alimentación escolar de los estudiantes de los colegios de la capitel del Tolima.

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