Por: Editor en Jefe - Publicado en julio 27, 2020
Sin ningún tipo de control se realizó una fiesta en predios del hijo de un congresista del Tolima, con menores de edad, pólvora, y mucho trago; lo único que no hubo fue cumplimiento de las medidas sanitarias.
Unidad Investigativa cambioin.com
En pleno aislamiento obligatorio preventivo para evitar la propagación del coronavirus en Chaparral, un municipio al sur del Tolima, con 11 casos confirmados de covid-19, se realizó tremenda rumba que violó todas esas disposiciones decretadas.
El lugar
El sitio donde se realizó el evento en la población de Chaparral se conoce ahora como la Finca: Toro Sentado, pero hace unos meses no se llamaba así; en plena campaña política en ese mismo sitio se realizó un evento con los mineros de esa zona del Tolima, y se les prometió que en esas tierras se construiría un proyecto de vivienda para ellos, si votaban por Rosmery Martínez Rosales, a la gobernación del Tolima, y Hugo Arce, a la alcaldía de esa localidad, ese día muchos de los asistentes salieron disgustados porque sintieron que les habían realizado una encerrona, con ese evento político.
Pasaron los meses, y las promesas no se cumplieron, porque los herederos de la finca Dagmar de la señora Lucía Hernández (QEPD) ubicada en el Kilómetro 5, vía Chaparral a Ortega, no le vendieron esas tierras a los mineros como lo prometieron, sino que ahora es propiedad de Mauricio Gaitán, hijo del Representante a la Cámara por el Tolima del partido liberal, Ángel María Gaitán Pulido.
La rumba
Según las pruebas enviadas a la redacción de cambioin.com el portal de las noticias por lo menos 300 personas asistieron a la fiesta de 15 años, de la hija de Hector Fabio Olaya Acuña
representante de la empresa minera MEPRETOL uno de los patrocinadores de la campaña del actual mandatario de Chaparral Hugo Arce, lo peor de la historia es que entre los presentes habían menores de edad, y personas de la tercera de edad, población con la que se debe tener mayor cuidado, y lo peor sin ningún tipo de medidas de bioseguridad dispuestas por las autoridades.
Los vecinos sorprendidos por el escándalo con música a gran volumen, acompañado de una tremenda quema de pólvora, llamaron a la policía para que ellos acabarán con ese bullicio, pero la sorpresa fue mayúscula cuando a los agentes que llegaron a mirar lo que sucedía, les dijeron que la fiesta tenía permiso de la alcaldía de chaparral, y que inclusive los hijos de varios funcionarios de la administración Arce, participaban de la misma, inclusive la descendiente de Eucaris Arcila directora local de salud, que se suponía debe hacer valer las medidas de bioseguridad, estaba presente en la rumba como lo comprueban algunas fotos tomadas por la menor.
En la fiesta realizada el pasado jueves 23 de julio del 2020 desde las 2 de la tarde, y que se extendió hasta la madrugada del siguiente día, se vio durante todo el evento que las mesas estaban llenas de cerveza, sin importar que estuvieran en muchas de ellas menores de edad. Llama la atención que el retén que tiene la policía para controlar el ingreso a Chaparral queda a 200 metros de la finca donde se cumplió la celebración de los cumpleaños.
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