En los 150 años del fallecimiento de Manuel Antonio Carreño.

Por: Jorge Ancizar Cabrera Reyes. Columnista de cambioin.com

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"El saber es la parte más  considerable  de la  felicidad". Sófocles, poeta griego.

"La libertad no es un estado sino un proceso; sólo el que sabe es libre, y más libre el que más sabe. Sólo la cultura da libertad. No proclaméis la libertad de volar, sino dad alas; no la de pensar, sino dad pensamientos. La libertad que hay que dar al pueblo es la cultura". Miguel de Unamuno, escritor y filósofo  español.

La educación,  la ciencia,  la innovación  y la tecnología,  deben  estar al alcance de todos.

Manuel Antonio Carreño, su nacimiento ocurrió el 17 de junio  en Caracas, Venezuela en el año 1812 y su muerte fue el 4 de septiembre en París, Francia en el año 1874, se destacó por haber sido un excelente pedagogo, diplomático y músico.

Los principios y valores, en los que nos formaron y educaron en nuestra niñez, infancia y adolescencia, para ser personas respetuosas, educadas, tolerantes, vivir en convivencia pacífica con humildad  y el amor a Dios, a los Padres, a los Maestros, a la Sociedad, a la Madre Tierra, a su variada Biodiversidad y sus  Ecosistemas.

Las enseñanzas como pedagogo de Manuel Antonio Carreño, fueron entre otros,  los buenos modales y deben ser, según él:  "compórtate con los demás como quisieras que ellos se comportaran contigo”. Digo “por favor”, “gracias” y “con permiso”.

Está fue la versión original de Cuellar Editores, su autor Manuel Antonio Carreño.

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